6 de junio de 2013

Llega desde Cádiz el primer disco de Calle Salvador

Tras varios trabajos destacados que han consolidado una gran banda como instrumentistas y vocalistas, Calle Salvador lo forman tres chicos naturales de Cádiz, que consiguen demostrar con este su primer disco, que sí, que la guitarra puede huir de tópicos, arreglos obvios y sonsonetes a los que se les ve venir. Que el pop está vivo y, como tal, busca su espacio y su propia dirección musical.
Este primer disco está producido y arreglado por Juanma Leal, a su vez, componente de la banda que junto a sus dos amigos Julián Delgado y Sergio García descubrieron allá por el 2008 una gran compenetración musical. Es, por tanto, un álbum moderno, contemporáneo y muy compacto, forjado a base de horas de composición y arreglos conjuntos.
Sergio García comenzó a dar el embrión al grupo  “nos sentamos un buen día Julián y yo para decidir qué hacer con nuestras ideas musicales y decidimos formar este grupo, en un principio éramos dos y propusimos a Juanma que, como buen compositor, productor y arreglista que es, sacara el mejor brillo posible a nuestras canciones y aceptó sin pensarlo dos veces”.
Tanto es así, que ahí se empezó a gestar lo que hoy conocemos como trío, y Juanma compaginando sus tareas de producción, sueña con llegar con la banda  “donde un día llegué con el resto de mis canciones”, y además, prosigue “en mi cabeza solo existen 3 palabras: Amor, trabajo y perseverancia”
El círculo se cierra con Julián Delgado, el cual ha manifestado su interés por la música desde muy niño, y esto le hace pronunciar  “que el único modo de conseguir algo en la vida es caminando poco a poco”. Julián posee además de esta personalidad una imagen que no dejará indiferente a nadie.
Músicos de mirada limpia, sensible, modesta y sincera reflejada en los cortes del álbum con los que pretenden dar un salto cualitativo, ofreciendo un sonido más contundente y acorde con este nuevo siglo.
Una obra plagada de influencias musicales desarrolladas de un modo barroco, pero interpretadas de forma primaria y básica, como hacen los maestros del blues o el flamenco. El universo sonoro al que consigue uno llegar escuchando este disco es simplemente ilimitado. Calle Salvador, sin duda la revolución sonora de 2013.

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